lunes, 26 de septiembre de 2011

Dissident

Hace un par de semanas, estábamos tomando una cerveza con la Turca en un bar de Cipo. En un momento, bajó el nivel de la musicalización y se oyó un tema de una banda típica de la decadencia noventista "Vilma Palma e Vampiros". Esto es de la época de Tinelli, comenté. La Turca respondió: todavía estamos en la época de Tinelli. Ahí pensé dos cosas, la primera es que soy un afortunado por no tener televisor en mi casa. La segunda, que las continuidades con la década del '90 se miden hasta en elementos básicos de la cultura de masas. 

Relacionado con esto, hace bastante que vengo encontrando (como cualquier observador atento y no tanto) muchas similitudes entre el apogeo del menemismo y el del kichnerismo, principalmente en el consumismo desenfrenado de las clases medias, el conformismo social generalizado y la resurrección de personajes nefastos como Soria, sobre lo que comentamos en el post anterior a este. 

En ese momento como ahora, estoy desde el punto de vista personal, político y cultural, en minoría. Incluso ayer, conversando con un vecino que siempre me ayuda cuando se me inunda mi casa, me sorprendió que decía "che qué bueno el kirchnerismo, a mí me permite ahorrar", como si el ahorro fuera un valor en sí mismo. Así que bue...

Estamos en minoría, muchachos. Y ya que nos obligan a repetir los '90, me imagino no se van a ofender si les vuelvo a pasar una canción vieja pero muy grossa....





3 comentarios:

Sebastian dijo...

Hola. Empecé a leer el blog hace unos meses.

A veces es complicado luchar contra el conformismo, mas que nada por esa idea de que "estuvimos en la ruina y ahora puedo comprar cosas".

Pero cuando uno explica el porque no tenemos que conformarnos con esto las ideas llegan. En general llegan. Pero ahí creo que entra el tema de la propaganda, El Kirchnerismo obviamente tiene mucho mas alcance para extender la vision de que esto es lo mejor que hay...

saludos.

el muerto dijo...

Esto es exactamente lo que pensaba en silencio desde hace unos meses, empezar a percibir que todos se parece demasiado a algo que ya vivimos.


Saludo noventista, pero de los noventas buenos

JDM dijo...

Gracias por los comentarios, muchachos. Un abrazo.